Al despertar sobresaltado en una tranquila mañana
senti las mismas emociones del insecto kafkiano
que me conmocionaron en mi infancia.
El mirarse al espejo y ver un ser diferente,
con las alas rebanadas o con nuevas
y extrañas caracteristicas fisicas.
El hacerse a un lado en medio de la noche
y que el agudo punzon envie un raudo mensaje a mi cerebro
recordandome que estoy del lado equivocado,
Quedando rendido y exhausto mirando al infinito
con la sensacion confortadora de girar
y levitar a centimetros del techo.
De pronto, el rumor de una sombra
me devuelve abruptamente a la realidad,
entonces solo resta conformarme
con explorar los surrealistas y cotidianos paisajes
a los cuales mi mente habituada esta.
Muchas veces uno tiene que aprender a dejar de lado
todo aquello que le conmueve,
todo lo que le gusta y le fascina
e intercambiarlo por actividades
acaso insulsas o cargadas de tension
y que...
sin duda por la fuerza
encontraremos un gustillo confortador.
Extraño la adrenalina correr por mis venas
las conversas de amigos
en medios de olimpicas competencias
los cafes y los vinos
en medio de electricos acordes.
Extraño tambien tu dulce sadismo
la forma en que me tratas
y la forma en que me muestras tu desden
Pero te quiero,
a pesar que con tus gritos rompes mis ilusiones
y te extraño tanto...
Y aunque ahora mi mundo es mas abierto
lentamente me refugio mas en ti.
No por un instinto protector
sino porque creo ciegamente en la unicidad de tu ternura
y del valor infinito de tu sadico cariño.
Pues al igual que yo,
tu ser tambien cambio de aspecto
el antiguo sentido de atencion
se torno gris y aspero.
Y tengo la leve sospecha que a partir de entonces
empeze a causarte repulsion,
y te espantaste de mi metamorfosis.
Pero a diferencia de la novela kafkiana
creo que convertido en un extraño ser
pude huir y escapar de mis miedos,
superar muchas fobias y trabas.
Pero aun te extraño y te quiero
aunque mi cariño valga poco para ti.
Quiza mi percepcion no sea la correcta,
pero esta noche senti el dulce eco de tu voz
te percibi tan cercana y tierna como siempre.
Y a la vez senti una extraña sensacion de insecto en mi ser
pero me gusta mi nueva y amorfa apariencia,
porque aun puedo sonreir y soñar
como lo haces tu seguramente
en medio de tus cavilaciones y luchas,
en medio de tus manias,
de las tantas que compartimos y comprendemos
por eso te quiero a pesar que este cariño tenga poco sentido para ti.